México- En
medio de la impunidad en el sexenio del presidente Felipe Calderón los
muertos en México ya no se cuentan de uno en uno. Se cuentan por
montones como los 26 cadáveres arrojados en plena Guadalajara o los 35
en Boca del Río.
Por cientos se registran los desenterrados de narcofosas en Durango, Tamaulipas, Nuevo León, Guerrero, hasta el momento.
Con el Operativo Michoacán Felipe
Calderón inauguró lo que llamó su guerra contra el crimen organizado el
11 de diciembre de 2006.
A cinco años de gobierno y a uno de que
concluya su administración, niños, mujeres, estudiantes, activistas
sociales, empresarios, periodistas, adolescentes y otros mexicanos han
perdido la vida.
Recurriendo como metodología a la
comparación de las tarjetas informativas de las secretarías de Seguridad
Pública tanto municipales como estatales y las estadísticas de las
fiscalías y procuradurías generales de justicia de los estados con la
información del Sistema Nacional de Información, Zeta llegó a la
conclusión que durante los cinco años de gobierno del presidente Felipe
Calderón la cantidad de muertos llegó a 60 mil 420, escalofriante cifra
que incluye lo que el gobierno federal clasifica como “ejecuciones”,
“enfrentamientos” y “homicidios-agresiones”.
La alarmante suma se obtiene del siguiente desglose anual:
En diciembre de 2006 Zeta registró 62 muertes relacionadas con el
crimen organizado. En 2007: 2 mil 826. 2008, 6 mil 837. 2009, 11 mil
753. 2010, 19 mil 546. Y en 2011, del 1 de enero al 31 de octubre, la
cifra llegó a 19 mil 396.
La validez de las estadísticas de Zeta está sustentada también en el
discurso del gobierno federal: Cuando Alejandro Poiré informó el 12 de
enero de 2011 que durante 2010 sucedieron 15 mil 273 asesinatos
vinculados con el crimen organizado de un total de 20 mil 127 homicidios
dolosos reportados por la Secretaría de Seguridad Pública Federal, en
realidad el funcionario federal reconoció tácitamente que 75.88%
correspondía a crímenes relacionados con el narcotráfico.
Ahora que del 1 de diciembre de 2006 al 31 de octubre de 2011 el
Sistema Nacional de Información da cuenta de 80 mil 107 homicidios
dolosos, los 60 mil 420 relacionados con el crimen organizado
registrados por Zeta corresponden a 75.42% del total de homicidios
dolosos cometidos en cinco años de gobierno calderonista.
Los anteriores son los muertos oficiales, pero hay otros que las
autoridades tanto estatales como federales prefieren ocultar ante la
comunidad mexicana e internacional.
LOS MUERTOS INCÓMODOS
No todas las ejecuciones ocurridas en los estados están siendo
registradas por el Sistema Nacional de Información. Un ejemplo muy claro
es el estado de Chihuahua: La fiscalía de aquella entidad informó en
noviembre de 2011 que entre el 1 de enero de 2008 y el 31 de octubre de
este año sucedieron en Chihuahua 16 mil 456 “homicidios dolosos” de los
cuales 2 mil 549 ocurrieron en 2008, 4 mil 543 en 2009, 5 mil 898 en
2010 y 3 mil 466 durante los primeros 10 meses de 2011.
No obstante el Sistema Nacional de Información a través del
Secretariado Ejecutivo sólo reporta 11 mil 588 “homicidios dolosos”: 2
mil 30 en 2008, 3 mil 156 en 2009, 3 mil 806 en 2010 y 2 mil 596 en los
primeros 10 meses de 2011. Es decir, el Sistema Nacional de Información
no da cuenta de 4 mil 868 homicidios dolosos. Sólo hay dos opciones: O
la fiscalía de Chihuahua no reporta 100% de los muertos al gobierno
federal o el Sistema Nacional de Información no registra la cantidad que
las autoridades estatales le reportan.
De hecho en la edición 1945 correspondiente a la semana del 8 al 14
de julio de 2011
(http://www.zetatijuana.com/2011/07/11/50-mil-ejecuciones/) Zeta dio a
conocer que el 14 de marzo de este año la Fiscalía General de Justicia
del Estado Chihuahua reportó 7 mil 209 homicidios dolosos ocurridos en
2010, pero en noviembre de 2011 sólo reconoció que en 2010 ocurrieron 5
mil 898. Es decir, mil 311 homicidios dolosos no son reconocidos por la
misma institución.
Entonces si la Fiscalía General de Justicia del Estado de Chihuahua
no reconoce mil 311 ejecuciones más 4 mil 868 que no reporta el Sistema
Nacional de Información, resulta que por lo menos 6 mil 179 cadáveres
son desconocidos por ambas instituciones.
Lo único que informó en noviembre último la Fiscalía General del
Estado de Chihuahua fue la cantidad de 9 mil 604 homicidios dolosos
relacionados con la delincuencia organizada: mil 024 en 2008, mil 976 en
2009, 4 mil 138 en 2010 y 2 mil 466 durante los primeros 10 meses de
2011.
Zeta ha solicitado entrevista durante todo 2011 con el licenciado
Carlos Manuel Salas, fiscal general del estado de Chihuahua, para que
responda si existe ocultamiento de información al gobierno federal o si
es este último el que no registra el 100% de homicidios dolosos
reportados por las autoridades federales. Este semanario no ha obtenido
respuesta favorable.
Recientemente se le preguntó a un funcionario del Sistema Nacional de
Información a propósito de sus estadísticas a través de las cuales el
gobierno federal reporta el total de ejecuciones, si las procuradurías
estatales están reportando el total de homicidios dolosos al Sistema
Nacional de Información.
Contestó: “Nosotros registramos lo que las procuradurías nos mandan”.
Para ilustrar un panorama de lo que ocurre a nivel nacional sobre el
ocultamiento de los muertos, puso como ejemplo que la Procuraduría
General de Justicia del Estado de Veracruz no había reportado ningún
secuestro durante todo 2011 al Sistema Nacional de Información. El
funcionario contestó a Zeta con una pregunta retórica: “¿Tú les crees?
Yo no.”
LOS MUERTOS DE LA FOSA COMÚN
En las estadísticas del Sistema Nacional de Información existe una
especie de fosa común virtual. Ahí están amontonados los muertos no
identificados, muchos desaparecidos reclamados por familiares en las
marchas, los que quién sabe de qué país centroamericano venían, los
calcinados, los pedazos de los desmembrados, los cráneos encontrados por
montones, los cuerpos putrefactos desenterrados como si fueran papas de
las fosas clandestinas por todo el país, las cabezas sin cuerpo dentro
de bolsas de plástico negro.
De las 60 mil 420 ejecuciones registradas por Zeta durante cinco años
de gobierno del presidente Felipe Calderón clasificadas como homicidios
dolosos cometidos “por arma de fuego”, “por arma blanca”, “sin datos” y
“otros”, 21 mil 768 corresponden precisamente al rubro de “otros”: En
2007 el Sistema Nacional de Información registro 4 mil 202 “otros”
muertos, 3 mil 487 en 2008, 3 mil 946 en 2009, 5 mil 25 en 2010 y 5 mil
108 durante 10 meses de 2011.
Un funcionario del Sistema Nacional de Información aseguró que en el
rubro de “otros” tienen su tumba virtual los decapitados y otros
difuntos para los cuales no existe una categoría en el formato de
Incidencia Delictiva del gobierno federal:
“Si es un decapitado, pues obviamente en ‘otros’, porque no está la
categoría de decapitados. Tampoco hay un apartado que diga
‘ejecuciones’, ‘decapitados’, que estén específicamente y que tú digas:
‘Bueno, ¿dónde está el descuartizado que encontraron hace dos
semanas?’”, diría el funcionario del Sistema Nacional de Información.
Por si fuera poco, de las 60 mil 420 ejecuciones ocurridas durante 5
años de gobierno del presidente Calderón, 6 mil 257 difuntos son
clasificados como “sin datos”: En 2007 el Sistema Nacional de
Información registró 746 muertos “sin datos”, 2 mil 302 en 2008, mil 43
en 2009, mil 275 en 2010 y 891 difuntos “sin datos” del 1 de enero de
2011 al 31 de octubre de 2011.
Para acabar pronto, entre el rubro de “otros” con 21 mil 768
cadáveres y la categoría de “sin datos” con 6 mil 257, en cinco años de
gobierno suman 28 mil 25 difuntos. En otras palabras, de los 60 mil 420
crímenes cometidos en cinco años, 46.38% son muertes clasificadas como
“sin datos” y “otros”; es decir, el gobierno federal desconoce la
identidad de 28 mil 25 muertos.
“El punto es que hasta que no exista una investigación seria,
creíble, que realmente son muy escasas en México, fundada, es imposible
determinar quiénes han sido estas víctimas y quiénes son sus
responsables”, explicó fehacientemente a Zeta el doctor José Miguel
Vivanco, director ejecutivo de Human Rights Watch (HRW).
“Lo que ocurre en México es que no existen investigaciones creíbles”, sentencia Vivanco.
Asimismo, Diego E. Zavala, especialista en derechos humanos de México
para Amnistía Internacional (AI) con sede en Londres, explicó sobre la
situación crítica de los derechos humanos en México:
“El gobierno (de México) ha reiterado a menudo su compromiso con la
protección de los derechos humanos durante su lucha contra el crimen
organizado. Sin embargo, los casos de las personas desaparecidas, las
fosas clandestinas, los secuestros y asesinatos ponen de relieve la
situación crítica de los derechos humanos en México.”
AI coincide con HRW sobre la nula investigación del gobierno federal
para por lo menos determinar la identidad de las víctimas, menos para
sentenciar a los culpables de las 60 mil 420 ejecuciones:
“Lo que urge es la investigación”, concluye el doctor Diego E. Zavala
BC, DESHONROSO CUARTO LUGAR NACIONAL
Del total de 60 mil 420 muertes relacionadas con el crimen organizado
durante los últimos cinco años, 48 mil 692 corresponden a 12 estados.
Es decir, 12 entidades federativas concentran 80.5% del total de
crímenes.
En primer lugar, Chihuahua. Se han registrado 12 mil 712 homicidios
dolosos relacionados con la delincuencia organizada entre el 1 de
diciembre de 2006 y el 31 de octubre de 2011.
Segundo lugar, Sinaloa con 7 mil 003. Tercer lugar, Guerrero, con 5
mil 175. Cuarto, Baja California con 4 mil 14. Quinto, Estado de México
con 3 mil 215. Sexto, Nuevo León con 3 mil 35. Séptimo, Durango con 2
mil 880. Octavo, Jalisco con 2 mil 535. Noveno, Michoacán con 2 mil 408.
Décimo, Tamaulipas con 2 mil 291. Undécimo, Sonora con 2 mil 66 y
duodécimo, Coahuila con mil 358.
LOS ‘DAÑOS COLATERALES’
El sexenio del presidente Felipe Calderón también se ha caracterizado
por las muertes de civiles que su propia administración llama “daños
colaterales”: Niños, estudiantes, empresarios, periodistas, activistas
sociales.
El gobierno del presidente Calderón reconoce: “90% de bajas está en
la delincuencia organizada. Sólo un 10% de esas bajas son de las
instituciones y de blancos civiles”, informó la Secretaría de
Gobernación en abril de 2010.
Si Zeta ha documentado 60 mil 420 muertes producto de la guerra de
Calderón contra el crimen organizado durante su sexenio, el 10% de
“blancos civiles” serían 6 mil 42.
De acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos 5 mil 397
personas han sido reportadas como extraviadas nada más en el sexenio
del presidente Felipe Calderón y 8 mil 898 cadáveres no identificados
han sido algunos de los “resultados” de su “guerra” contra el crimen
organizado.
Asimismo la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Chihuahua
documentó 12 mil niños huérfanos por la violencia en Ciudad Juárez, 120
mil personas desplazadas por la violencia según información de la
Comisión de Seguridad Pública de la Cámara de Diputados y más de 40 mil
mexicanos que han pedido asilo político de acuerdo con el Alto
Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
Entre “los daños” colaterales se encuentran señores y señoras que al
perder a sus familiares se han convertido en activistas sociales blanco
no sólo de la impunidad gubernamental incapaz de revolver sus casos sino
también del crimen organizado y del Estado mismo. No existe ninguna
investigación si son algunas autoridades o el crimen organizado quienes
han acabado con la vida de muchos activistas.
Fuente:
NUESTRA APARENTE RENDICIÓN